Un juez de Paz y Faltas de la localidad de Campo Largo, Chaco, condenó a un hombre a 30 días de arresto de cumplimiento efectivo en la comisaría local por como coautor responsable de portación de armas y desordenes en la vía pública en concurso real.
Sin embargo, párrafo seguido, dispuso la sustitución de la pena de arresto por la realización de ciento veinte días de trabajo comunitario, que en un principio sería para la Municipalidad local, pero ante la falta de respuesta del Municipio, se reemplazó por la realización de trabajos amigables con el ambiente para una escuela.
En concreto, el tribunal entendió que en el marco de una política judicial ambientalmente responsable se consideraba procedente sustituir el arresto por una medida de carácter socioeducativo y restaurativo, que en el caso sería la de hacer acciones de reforestación e implementación y mantenimiento de una huerta escolar.
El juez alegó que la medida se inspiraba en el Programa ECOjusticia aprobado por el Superior Tribunal de Justicia de Chaco (Resolución 308/25) que promueve “una justicia ambientalmente comprometida, orientada a reducir el impacto ecológico, fomentar prácticas sostenibles y generar una cultura institucional respetuosa del entorno”.
“Esta medida no solo representa una sanción efectiva, proporcional y pedagógica, sino que además promueve la reparación simbólica del daño social y fortalece los lazos comunitarios a través de un compromiso con el ambiente y las generaciones futuras”.
A su vez, el programa se vinculaba a los principios constitucionales de los arts. 41 y 43, la Ley Yolanda N° 27.592, la normativa ambiental provincial, entre otros.
Para el juez Jose Luis Haertel, “esta medida no solo representa una sanción efectiva, proporcional y pedagógica, sino que además promueve la reparación simbólica del daño social y fortalece los lazos comunitarios a través de un compromiso con el ambiente y las generaciones futuras”.
El hombre había sido denunciado por varios vecinos a los que molestaba, por lo cual también le ordenaron el cese de actos de hostigamiento, perturbación e intimidación contra los mismos y que diera unas “disculpas públicas y personales” a los denunciantes en el marco de una audiencia.
Para concretar las medidas comunitarias, se ofició al IFAA (Instituto de Investigaciones Forestales y Agropecuarias) para que colaboren con capacitación y concientización sobre buenas prácticas ambientales y a la misma institución para que junto a la Delegación de Agencias y Apoyo Territorial del Ministerio de Producción del Chaco, se le solicite la donación de plantines para reforestar y semillas para la huerta escolar.