En el marco del Jury de Enjuiciamiento seguido contra Martín Luciano Poderti, juez de Cámara del Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Mar del Plata, el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados de la Nación cerró la etapa de recepción de testigos y dio paso a los alegatos de las partes.
La acusación, en representación del Consejo de la Magistratura, estuvo a cargo de los senadores Luis Juez y Eduardo Vischi, junto al juez de la Cámara Federal de Casación Penal Diego Barroetaveña. En tanto, la defensa del magistrado fue ejercida por el abogado Gastón Marano. Conforme al artículo 17 del reglamento procesal del Cuerpo, también intervino el defensor público oficial Mariano Patricio Maciel, designado para acompañar el proceso y asumir eventualmente la defensa si fuera necesario.
Según la investigación, entre diciembre de 2019 y febrero de 2023, cuando se desempeñaba como secretario del Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional 2 de San Isidro, Poderti ingresó en varias ocasiones a una caja de seguridad del Banco Nación, sucursal San Isidro, y presuntamente sustrajo 144 monedas de oro, valuadas aproximadamente en 200 mil dólares, que habían sido secuestradas en una causa judicial y se encontraban bajo su custodia.
Cierre y últimas palabras
Durante su exposición, Barroetaveña encabezó los alegatos de la acusación y realizó un repaso de los cargos y pruebas incorporadas, solicitando al Jurado la destitución del magistrado. “No hay terceros. La prueba técnica y bancaria es terminante: no hubo forzamiento, no hay un error, no hay una complicidad con el banco, no hubo falla, no ingresó ninguna otra persona. El banco registró todos los accesos y siempre fue Poderti. Conclusión: con todos estos elementos no existe hipótesis alternativa razonable. Las 144 monedas de oro estaban en la caja y fueron sustraídas durante el período en que Poderti tenía la custodia exclusiva y realizó 19 ingresos irregulares”, aseguró el consejero.
Y continuó: “Una persona que actúa así no puede ejercer la jurisdicción. No hay dudas sobre el mal desempeño. Lo contrario es realismo mágico. Como dije anteriormente, estamos frente a un hecho donde la prueba es concluyente y arroja una sola respuesta. No hay equívocos ni ambigüedades, ni hipótesis de hecho distintas, tampoco caminos alternativos que pudieran explicar de otro modo el hecho que hemos probado. Todos los caminos conducen a una sola conclusión”.
El consejero también se refirió al legajo de Poderti y a su estado patrimonial, y recordó que el hecho ocurrió cuando el acusado era secretario y antes de obtener acuerdo por parte de la Cámara Alta. En ese punto, apeló a una anécdota futbolística: “Una vez, el Bambino Veira, en el segundo tiempo, hizo un cambio para sacar a un jugador. El jugador se enojó y le dijo: ‘¿Por qué me sacaste?’. Y el Bambino lo miró y le dijo: ‘¿Sabés lo que pasa, pibe? Vos nunca debiste haber entrado’”.
Finalmente, el propio Poderti hizo uso de la palabra para cerrar la instancia de alegatos. “Me presenté espontáneamente, di la cara, di las explicaciones, no oculté al Senado absolutamente nada”, se defendió, y añadió: “No puedo creer estar sentado acá”.
“Si se sabía este hecho, estoy seguro de que estos senadores que están acá no hubiesen aprobado el pliego de Poderti como juez. Señores jueces, para mí las cartas ya están echadas. El doctor Poderti no puede ser más juez”, concluyó Barroetaveña.
A su vez, el senador Juez señaló que el caso generó una postura unánime dentro del Consejo de la Magistratura: “Es muy difícil remover a un juez. Muy difícil. Se lo dice el único Juez que no está sometido a ningún mecanismo de remoción. Con lo cual quiero decirles que acá tuvimos una mirada absolutamente igual, absolutamente coincidente. La inconducta del doctor Poderti no es la del magistrado que nosotros, los argentinos, necesitamos”.
Por su parte, el abogado Marano defendió la actuación de Poderti y pidió al Tribunal rechazar el pedido de remoción.
Concluido el debate, el presidente del Tribunal declaró formalmente cerrada la etapa y el Jurado inició sus deliberaciones. La lectura del fallo —con las conclusiones y la parte dispositiva— fue fijada para el 18 de diciembre a las 12 horas.
Finalmente, el propio Poderti hizo uso de la palabra para cerrar la instancia de alegatos. “Me presenté espontáneamente, di la cara, di las explicaciones, no oculté al Senado absolutamente nada”, se defendió, y añadió: “No puedo creer estar sentado acá”.
Luego, se dirigió directamente al Jurado: “Apelo a que resuelvan esto con absoluta objetividad, sin quedar contaminados por la mentira, porque se han dicho cosas que no son ciertas”.
Próximos pasos
Concluido el debate, el presidente del Tribunal declaró formalmente cerrada la etapa y el Jurado inició sus deliberaciones. La lectura del fallo —con las conclusiones y la parte dispositiva— fue fijada para el 18 de diciembre a las 12 horas.
El Tribunal está integrado por los jueces de Cámara Víctor Arturo Pesino y José María Escobar Cello; los senadores Rodolfo Alejandro Suarez y Jesús Fernando Rejal; los diputados Manuel Quintar y Agustina Lucrecia Propato; y el abogado de la matrícula federal Antonio Manuel Estévez.