La Corte Suprema de Justicia avaló la extradición a Italia del ciudadano de ese país Leonardo Bertulazzi, de 73 años, miembro de las ex brigadas rojas, una organización terrorista responsable de numerosos hechos de violencia en Italia durante las décadas de 1970 y 1980.
Según se desprende del expediente “Bertulazzi, Leonardo y otro s/ extradición -art 52-”, Bertulazzi había sido capturado en Argentina en el año 2002: ingresó al país en moto, junto a una mujer, al cruzar un paso fronterizo cercano a San Carlos de Bariloche, desde Chile. Pero se encontraba beneficiado por una resolución de refugio desde 2004 que impidió su extradición en aquel momento.
Entre los crímenes más resonantes del grupo al que pertenecía Bertulazzi se encuentra el secuestro y posterior asesinato del ex Primer Ministro de Italia, Aldo Moro, en 1978.
Sin embargo, en agosto del 2024, el Gobierno argentino anunció su detención. Fue luego de que el Gobierno Nacional, tras un decreto que modificó la integración de la Comisión Nacional para los Refugiados, le quitara la condición de refugiado político.
La orden de detención fue librada por la jueza María Servini y las fuerzas policiales lo arrestaron en la casa del barrio porteño de Monserrat, donde vivía.
En noviembre del 2024, la Cámara Federal de Casación Penal hizo lugar al pedido de la defensa oficial y excarceló a Bertulazzi al sostener que la decisión de la Cámara Federal no había evaluado las circunstancias personales del solicitante, las cuales resultarían conducentes para conceder la libertad.
Servini rechazó los planteos de la defensa y declaró procedente la solicitud de extradición de Bertuzzi para el cumplimiento de una pena de 27 años de prisión. La defensa apeló ante la Corte Suprema. La Procuración General de la Nación propuso confirmar la sentencia.
Los jueces de la Corte Suprema resolvieron confirmar la sentencia apelada “en cuanto declaró la extradición de Leonardo Bertulazzi a la República de Italia” para cumplir la condena.
Los jueces resaltaron que “los alcances de este pronunciamiento no implican abrir juicio alguno sobre el reclamo del recurrente respecto de la pérdida de status de refugiado” y dispuso que “la jueza de la causa ponga en conocimiento de su par extranjero el extremo de la cuestión”.
Entre los crímenes más resonantes del grupo al que pertenecía Bertulazzi se encuentra el secuestro y posterior asesinato del ex Primer Ministro de Italia, Aldo Moro, en 1978.
Bertulazzi, quien ocupaba un alto rango dentro de la organización, estuvo vinculado a la logística del secuestro de Moro. Se lo condenó a 27 años de prisión. Su paso en las Brigadas Rojas comenzó en 1977, cuando fue herido por la explosión de un artefacto que armaba. Perteneció a la Columna Genovesa 28 de marzo y se lo conocía como Stéfano, su nombre de guerra.