Se presentó en el Senado un proyecto de ley para crear el Instituto Nacional de Inteligencia Artificial (INIA), un organismo federal y descentralizado que articule ciencia, Estado y producción para orientar el desarrollo de la tecnología.
El proyecto sostiene que se trataría de un “organismo de carácter federal, interdisciplinario y con participación de los sectores científicos, tecnológicos, productivos y sociales, que oriente políticas públicas en torno a la investigación, desarrollo, aplicación y monitoreo de la inteligencia artificial en beneficio del interés nacional”.
El instituto deberá redactar y aplicar un Código de Ética y un Protocolo de Evaluación de Impacto Algorítmico que asegure el respeto por los derechos humanos, la no discriminación, la equidad de género y la protección de datos personales.
El INIA, según la iniciativa, funcionará como un organismo descentralizado bajo la órbita de la Secretaría de Innovación, Ciencia y Tecnología, y tendrá la misión de promover la investigación, implementación y evaluación de sistemas de IA en todo el país.
Entre sus principales funciones se destacan el impulso a la transferencia tecnológica hacia el sector público y productivo, la articulación con universidades, gobiernos provinciales y actores sociales, el financiamiento de proyectos científicos, y la capacitación de profesionales y ciudadanía en general.
El instituto deberá redactar y aplicar un Código de Ética y un Protocolo de Evaluación de Impacto Algorítmico que asegure el respeto por los derechos humanos, la no discriminación, la equidad de género y la protección de datos personales.
Asimismo, estará dirigido y administrado por un Consejo Directivo, integrado por un Presidente/a designado/a por el Poder Ejecutivo y 10 vocales, que durarán dos años en el cargo.
“La Inteligencia Artificial (IA) está transformando el mundo en el que vivimos y las sociedades se enfrentan a grandes cambios impulsados por mutaciones en las interacciones sociales y en las relaciones productivas. En este marco, el despliegue masivo de tecnologías basadas en IA plantea enormes oportunidades, pero también desafíos éticos, sociales, laborales y educativos, entre otros, que requieren una intervención activa del Estado”, sostiene el proyecto en sus argumentos.
En ese marco, se agregó: “La creación del INIA también se alinea con tendencias internacionales que muestran cómo múltiples países están consolidando estrategias nacionales de inteligencia artificial con fuerte liderazgo estatal".
"Francia, Canadá, Corea del Sur, Japón, España y Finlandia ya han avanzado creando organismos especializados, marcos regulatorios y políticas de estímulo a la investigación”, concluyó el documento.