La Corte Suprema de Reino Unido dictaminó que la definición legal de una mujer se basa en el sexo biológico y no en el género, en el marco de la denuncia del grupo feminista transexcluyente For Women Scotland, que acudió a los tribunales para determinar la aplicación a mujeres transexuales de leyes de igualdad.
"La decisión unánime de este Tribunal es que los términos ‘mujer’ y ‘sexo’ en la ley de igualdad de 2010 se refieren a una mujer biológica y a un sexo biológico”, dijo la Corte.
Sin embargo, el Tribunal Supremo aseguró sin embargo que las personas transgénero están protegidas por la ley “no solamente contra la discriminación basada en la característica protegida del cambio de género, sino también contra la discriminación directa, discriminación indirecta y el acoso relacionados con su género adquirido”.
Las asociaciones de defensa del colectivo LGTB+ temen que las mujeres transgénero se vean vetadas de algunos lugares como los centros de acogida de mujeres.
El juicio giraba en torno a la interpretación de la ley británica de Igualdad (Equality act) de 2010 y a una ley de 2018 aprobada por el Parlamento de Escocia que establece que debe haber una representación femenina del 50% en los consejos de administración de los organismos públicos escoceses.
Para el gobierno escocés, el texto era claro: si una mujer transgénero obtuvo un certificado de reconocimiento de su género tras su transición (GRC), es considerada como mujer y tiene derecho a acceder a las mismas “protecciones que las que fueron declaradas mujeres al nacer”.
Pero la asociación “For Women Scotland” defiende que la norma se basa en el sexo biológico y llevó el caso a la justicia.
"Pensábamos que los derechos de las mujeres retrocederían y hoy los jueces han dicho lo que siempre hemos pensado: las mujeres están protegidas por su sexo biológico", celebró Susan Smith, codirectora del grupo.
"Las mujeres ahora pueden sentirse seguras sabiendo que los servicios y espacios destinados a mujeres están reservados para mujeres", añadió.
Las asociaciones de defensa del colectivo LGTB+ temen que las mujeres transgénero se vean vetadas de algunos lugares como los centros de acogida de mujeres.
El Gobierno laborista británico consideró por su parte que el dictamen aporta "claridad" sobre los espacios diferenciados por sexo, como centros para víctimas de agresión sexual o de violencia doméstica.
"Siempre hemos apoyado la protección de los espacios diferenciados por sexo en función del sexo biológico. El fallo del Tribunal Supremo sobre la definición de mujer en la Ley de Igualdad aporta claridad y confianza a las mujeres y a los proveedores de servicios como hospitales, albergues y clubes deportivos", añadió.
El organismo supervisor de la igualdad en el Reino Unido, la llamada Comisión de Igualdad y Derechos Humanos (EHRC, en inglés), celebró el dictamen al afirmar que un certificado trans no cambia el sexo legal de una persona a efectos de la Ley de Igualdad.