Una investigación sobre el funcionamiento de los juicios por jurados en Neuquén reveló que el 80% de los participantes manifestó que su visión sobre los Tribunales cambió favorablemente. La mayoría también se sintió orgullosa de servir como jurado.
En el VI Congreso Internacional de Juicio por Jurados, que organizó el Instituto de Estudios Comparados en Ciencias Penales y Sociales (INECIP), se presentó la investigación “El jurado neuquino”, que profundiza sobre el funcionamiento y la evolución del sistema de jurados en la provincia de Neuquén.
Se trata de la primera investigación sistemática sobre el funcionamiento del jurado clásico en nuestro país, que recupera la palabra de casi 300 personas que participaron como jurados populares en los últimos 25 juicios realizados en Neuquén entre principios de 2016 y diciembre de 2019. El documento fue conducido por Sidonie Porterie y Aldana Romano del Instituto de Estudios Comparados en Ciencias Penales y Sociales (INECIP) y la profesora e investigadora Valerie Hans de la Universidad de Cornell (EEUU), quienes trabajaron de manera conjunta con el Superior Tribunal de Justicia (TSJ) de la provincia.
Neuquén fue la primera provincia argentina en regular un sistema de juicio por jurados al estilo clásico y la pionera también en ponerlo en funcionamiento. Actualmente, ya son nueve las provincias argentinas y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires que cuentan con leyes de juicio por jurados. Desde el 2014 se han realizado más de 500 juicios por jurados en todo el país, según el informe.
De este modo, la investigación determinó que la “enorme mayoría de quienes participaron como jurados manifestó no haber tenido problemas para comprender la prueba, el testimonio de quienes fueron testigos, a los y las abogadas de las partes o a los y las juezas; al tiempo que, reconoció que las instrucciones de quienes condujeron técnicamente los juicios fueron útiles”. Sólo una minoría (19%) manifestó que tuvo dificultades para comprender la prueba.
La mayoría de quienes participaron como jurados dijeron no haberse sentido entusiasmados al ser convocados, pero tras la experiencia, el 86% de los jurados manifestó que la experiencia resultó “más favorable” o “mucho más favorable” respecto de sus expectativas iniciales.
Asimismo, el 76% de los jurados señaló que la prueba presentada “favoreció a un veredicto de culpabilidad”. De los 25 juicios analizados, 20 de ellos concluyeron con veredictos de culpabilidad. Para un 93% de quienes participaron como jurados las instrucciones sobre la ley fueron “útiles” o “muy útiles”; mientras que el 88% de los jurados dijeron que estuvieron “bastante” o “muy satisfechos” con los resultados de la deliberación.
La mayoría de quienes participaron como jurados dijeron no haberse sentido entusiasmados al ser convocados, pero tras la experiencia, el 86% de los jurados manifestó que la experiencia resultó “más favorable” o “mucho más favorable” respecto de sus expectativas iniciales.
Al final de la deliberación, un gran porcentaje (87%) dijo que “no se sintió frustrado o frustrada con la experiencia”; sino que, por contrario, se sintió orgulloso u orgullosa de servir como jurado (85%). Un 78% respondió que recomendaría la experiencia a otras personas, según el informe.
Por último, el 88% de los juradas dijeron que, luego de la experiencia, sus opiniones sobre el sistema cambiaron favorablemente. De igual forma, un 80% manifestó que su visión sobre los Tribunales cambió favorablemente.