La Justicia condenó al gobierno de Chubut a que “cese en su decisión de reducir la pauta publicitaria” al Diario de Madryn” a raíz de una nota periodística publicada. El juez consideró como “arbitraria” la conducta del Ejecutivo provincial ya que “de manera indirecta" afecta el “derecho de publicar sus ideas sin censura previa”, la “igualdad ante la ley”, y la “libertad de expresión y de prensa”.
La Justicia provincial condenó al Poder Ejecutivo de Chubut a cesar en la reducción de la pauta publicitaria del “Diario de Madryn” y restituírsela. DiarioJudicial.com habló con la directora del diario, Marisa Rauta, quien se mostró contenta con el fallo ya que consideró que el último año de trabajo en el medio fue “desolador” por la “actitud terrible” del ejecutivo provincial.
El fallo se da en el marco de la causa “Diario de Madryn S.A. c/ Poder Ejecutivo Provincial s/ Acción de Amparo” que se inició luego de que el Poder Ejecutivo provincial interrumpiera la pauta publicitaria al medio luego de que este publicara una editorial en la que consignaba que “el gobernador Mario Das Neves aplicaba el más recalcitrante nepotismo, garantizando puestos en el gobierno a gran parte de su familia y amigos”.
“Hubo condicionamiento y disciplinamiento a través de la pauta publicitaria” continuó la directora del medio chubutense. Explicando, además, que durante el lapso de tiempo en que no recibieron pauta hubo operaciones hasta con auspiciantes privados como empresas constructoras o pesqueras que bajaron la pauta al medio.
Ello motivo que el medio presentara una acción de amparo contra el Poder Ejecutivo para que cese “con sus políticas discriminatorias en relación a la abrupta suspensión de la pauta publicitaria a partir del 22 de diciembre de 2010” ya que desde el año 2000 “en forma continua, recurrente y periódica otorgaba a ese diario” la pauta.
Según argumentaron en la causa la conducta del Ejecutivo provincial se enmarca en el “abuso” de la discrecionalidad de los fondos públicos, puesto que “el desenlace intempestivo se produjo luego de una columna política publicada un día antes de la interrupción del envío de publicidad”.
El argumento del gobierno provincial sostiene que no se ha demostrado “la arbitrariedad o ilegalidad manifiesta del acto u omisión” ya que, a su parecer, se “confunde discrecional con arbitrariedad”. A lo que agrega que “el amparo no es la vía idónea para peticionar el supuesto cese de políticas discriminatorias de las cuales no aportó ni una prueba y que no existe violación alguna de derechos y garantía constitucionales”.
Ante esto, en el fallo Luis Mures consideró que “atento los derechos constitucionales en juego -derecho de publicar sus ideas sin censura previa, igualdad ante la ley, libertad de expresión y de prensa-…no se advierte remitir el tratamiento de la cuestión planteada a otras vías ordinarias, resultando esta la idónea”.
“Lo arbitrario de la conducta desplegada por el Gobierno demandado es justamente otorgar la pauta publicitaria al diario actor y disminuirla drásticamente sin justificación alguna”, consigna el fallo y agrega: “lo que de manera indirecta afecta los derechos constitucionales mencionados y que rigen en un sistema republicano como el nuestro, más teniendo en cuenta que continuó otorgándola a los restantes medios gráficos, tal como surge del informe pericial”.
Lo que para el magistrado “evidencia una actitud discriminatoria hacia la parte actora” y lesiona concretamente “los derechos constitucionales previstos en los arts. 14, 16, 17, 32, 75 inc. 22 de la Constitución Nacional y en los arts. 1,7,13,18 inc. 4 e inc. 10, 19, 61, 62 de la Constitución Provincial”.
Por ello condenaron a la gobernación del Chubut, al “cese en su decisión de reducir la pauta publicitaria al Diario de Madryn, debiendo guardar las futuras contrataciones una base razonable de adjudicación de las mismas” y respetando “un equilibrio con aquellos medios gráficos de características análogas”.
Esta semana el fallo firmado por Mures fue apelado por el gobierno provincial, lo que ya fue contestado por el diario. “Nunca comulgamos con el establishment y eso no gusta”, concluyó Marisa Rauta.