La diputada Conti busca equiparar a los jueces de distintas instancias en cuanto a la obediencia a la concurrencia diaria a Tribunales, eximiendo únicamente a los jueces de la corte, que lo harán los días y horas que fijen para los acuerdos y audiencias. La reforma busca lograr una mayor eficacia en la gestión judicial.
A fines de septiembre pasado, Diana Conti comentó que hacía una semana había presentado un proyecto de ley al Congreso para modificar la ley 24.050. Ésta exige sólo a los jueces de primera instancia cumplir un horario en sus respectivos juzgados de Tribunales, mientras que los demás magistrados sólo deben hacerlo en caso de audiencia o acuerdos. Esa es –precisamente- la modificación que está siendo tratada en el Congreso.
El artículo 11 del decreto 1285/58 de Organización de la Justicia Nacional fija diferentes horarios para los magistrados de primera instancia, que para los jueces de Cámara y de tribunales orales. A criterio de Conti, la diferenciación vigente carece de “sentido práctico y utilidad”.
Por otro lado, la diputada acusó a muchos jueces porque “dejan de concurrir a sus despachos todos los días y durante la totalidad del horario hábil judicial, actual previsión legal que intentamos modificar”. En ese sentido remarcó que el Poder Judicial requiere “mayor eficacia y celeridad, recursos humanos y materiales, y mayor contracción al trabajo”.
El proyecto detalla: “Los jueces de primera instancia, de la Cámara Nacional de Casación Penal, de las Cámaras Nacionales, de Apelaciones y de los Tribunales Orales, concurrirán a sus despachos todos los días hábiles, durante las horas que funcione el tribunal. Los jueces de la Corte Suprema lo harán los días y horas que fijen para los acuerdos y audiencias”.
Tal como establece la letra de la iniciativa, los magistrados del Máximo Tribunal están exceptuados de la obligación porque, según Conti, "tienen un suficiente control social".
De esa manera, si la Cámara de Senadores ratifica el proyecto, los jueces estarán obligados a cumplir el "horario judicial", que en el caso de la ciudad de Buenos Aires es de 7.30 a 13.30.
Por otro lado, la diputada e integrante del Consejo de la Magistratura fue también la impulsora de una resolución aprobada a fines de diciembre por unanimidad, por la que los jueces (excepto los de la Corte Suprema), puedan ejercer la docencia en horario judicial, lo que se concretará a partir del próximo año lectivo.