Hornos admitió, sin embargo, que aceptará cualquier decisión que adopte el Consejo si ese cuerpo estima que no están “dados los requisitos reglamentarios”, en tanto tomó distancia de la situación planteada en torno al integrante del Tribunal Oral en lo Criminal 23 Héctor Magariños , uno de los candidatos firmes a ocupar la vacante, ya que en un concurso anterior había obtenido un alto puntaje para ocupar el cargo que terminó en manos del ex juez federal Gabriel Cavallo.
“Mi pedido de oscuro o turbio no tiene nada”, se lamentó el camarista al desmentir las versiones que involucraban su reclamo con una maniobra para desplazar a Magariños. De todos modos, Hornos estimó que en caso que el Consejo de la Magistratura rechace su pedido y se abra concurso, Magariños tendría que presentarse nuevamente a concursar por esa vacante, desvirtuando así una versión periodística que había asociado una sanción que la Corte Suprema le aplicó al magistrado con la intención de frenar su acceso a la Cámara Federal. "Se trata de un nuevo concurso por un nuevo cargo", explicó.
“Si me dicen sí, no hay concurso, pero si me dicen que no, habrá concurso”, graficó el magistrado al explicar que el anexo del reglamento del Consejo en el cual se establecen las condiciones para el traslado de jueces establece como requisito que “la vacante a la que se solicita el traslado corresponda a la misma jurisdicción y tenga la misma competencia en materia y grado que el cargo que el juez ocupa”.
En tal sentido, explicó que según el mismo reglamento “este requisito no será exigido cuando el interesado haya obtenido un anterior acuerdo del Senado de la nación para desempeñar la función a la que pide su pase”, el que según explica obtuvo en mayo de 1993.
Por ese entonces en la Cámara Federal existían dos vacantes, una de las cuales ocupó el ex juez Juan Pedro Cortelezzi, en cuyo reemplazo y años después ingresó Cavallo, constituyéndose en el primer integrante de ese estratégico tribunal que ingresó por concurso.
En relación con la competencia, el magistrado advirtió que existe jurisprudencia de la Corte que considera al fuero Penal Económico como Federal, a la vez que recordó que en el interior del país son innumerables los juzgados federales que entienden en delitos que en esta capital son competencia del fuero al que actualmente pertenece. Las aseveraciones del camarista coinciden con corrientes actuales que reclaman la instauración de un fuero federal de competencia única.
Pero también Hornos admite la posibilidad que su solicitud sea rechazada y a la vez conoce un clima hostil en algunos sectores del fuero Federal para que ocupe la vacante que dejó Riva Aramayo.